Por iniciativa de los grupos Procoam y Nuevo Coam se aprobó en la pasada Junta de Representantes la celebración del congreso de arquitectos y arquitectas para tomar el pulso del estado de la profesión, convocando a arquitectos, colegiados o no, recién titulados y estudiantes.
Porque las personas son las protagonistas y, en el Colegio, las aportaciones de todos los colegiados tienen cabida, hay que activar nuevos contextos de PARTICIPACIÓN y DEMOCRACIA en los que todos los colegiados tengan voz y voto.
La desafección colegial es un problema que nos preocupa. En las campañas electorales de los últimos años, la mayoría de las candidaturas presentaban propuestas en sus programas enfocadas a paliar esa desafección, en especial de los jóvenes, intentando recuperar el interés de los arquitectos por pertenecer al Colegio.
No, no. Tranquilos que no nos hemos equivocado de fecha. Sabemos que estamos a día 1 de abril.
JUSTIFICACIÓN: Es una iniciativa que nace a partir de la convocatoria reciente por parte del Colegio de Arquitectos de Sevilla de un congreso para discutir el estado de la profesión bajo el lema "La casa está que arde".
En la anterior entrega nos comprometimos a explicar con mayor detalle cómo se produjo el proceso que culminó con la creación de la oficina, con un afán didáctico, que ponga en valor el tiempo, esfuerzo y recursos que requieren la mayoría de los nuevos proyectos que afronta el COAM.
El pasado 5 de marzo se celebró un debate con motivo de la presentación de los premios COAM 50 AÑOS. Lo que comenzó como una celebración se convirtió en un funeral.
En la próxima Junta de representantes presentamos la proposición de que se organice en Madrid un congreso provincial de arquitectos y arquitectas para tomar el pulso del estado de la profesión, convocando a arquitectos, colegiados o no, recién titulados y estudiantes.
La Comisión Permanente de la Junta de Representantes es el órgano de comunicación entre los Representantes y la Junta de Gobierno.
Han pasado 22 años desde que se aprobó la primera Directiva Europea 2002/91/CE relativa a la eficiencia energética de los edificios que, junto con el CTE, cambió la forma de concebir la construcción. Ahora que lo teníamos superado, el pasado martes 12 se aprobó la nueva Directiva EPBD, que tendremos que aplicar en un plazo máximo de 2 años.